Just milk the cows, man!

sábado, 24 de marzo de 2012

Hola mis queridos seres humanos, y moluscos, si se da el caso.

Como están ustedes? Yo estoy muy bien. Ahora mismo me encuentro en la biblioteca de Naas y mis sobacos huelen peste porque hace cuatro días que no me ducho. Eso es normal en mi vida (mi récord es cinco dís sin ducharme y tengo que superarlo) y no es por que yo sea un cerdo, que quizá lo se un poco, sino porque el termo de la casa sólo lo encienden algunos días. Hoy, antes de venir, tenía el pelo like a la cresta del gallo que vive en la casa. Me ha parecido prudente lavar mi cráneo para la ocasión y al finalizar la tarea, el agua era como un pozo de mierda con tropezones.

Sabéis una cosa? Me han cambiado el cuerto. La chica de mi edad quería en el que yo estaba antes para dormir con su hermana de 16, que viene los fines de semana de su colegio en Dubín.

La cosa tienes sus pros y contras. La habitación está en la planta de arriba, así que tiene mejores vistas, por supuesto. Pero carece de algo de gran necesidad humana: Un báter que funcione. Tampoco funciona la ducha, así que ahora me tengo que duchar en el ba;o de Jason, el mayor (me dijeron que siguiera utilizando el anterior. Pero es que veréis... no tiene pestillo. Yo prefiero evitar sorpresas).

En cuánto a la defecación, estoy bastante acongojado, porque a partir de hoy tengo que usar el báter común localizado en la cocina y salón en la segunda parte de la casa. Hoy he tenido que... que eso. Y ha sido horrible. No hay nada peor que excretar con tensión (Dato Informativo: NINGUNA de las habitaciones tiene ventana, y el ba;o está en un piso bajo... si a alguien le da por hacer turismo en el momento X...).

Mi prima Amalia es una pesada y quiere que la haga famosa estampando su nombre en mi blog. Pues bien, ya que hablamos de este tema me parece de lo más adecuado mencionarla (siempre con muy mucho amor de oso de peluche).


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