El retorno del rey.

Hola queridos fans, amigos, familiares y Duquesa de Alba.

Como estáis?? En realidad, me da un poco igual, porque la cuestión es como estoy yo. Pues yo estoy muy bien.

Llegué a Dublín despues de un divertido viaje en avión. Me pasé todo el vuelo ligando con ni;as de 13 a;os y jugando a las cartas. También (por supuesto) les conté historias de las mías para que se partieran un poco de risa.

Estaba yo esperando en la puerta de entrada del avión. Le pregunté a una pareja de mariquitas con flequillito y piercings en la nariz (intuyo también en el ombligo) que si ese era el vuelo a Dublín. En realidad ya lo sabía, porque tenía un enorme cartel delante en el que ponía claramente: DUBLÍN. Pero yo soy un poco imbécil y por preguntar no perdía nada. Obviamente me dijeron que sí (con una sonrisita que me dió un poco de miedo acompa;ada con su, oh!, voz).

Más adelante había una clase entera de chavalines y ni;itas. Me puse cerca suya a esperar que abrieran la puerta de acceso. En realidad yo creo que creían que hablaban bajito, pero yo pude oir estruendosamente que decían: "Mira que mono". No es por echarme flores, pero realmente yo tengo muy buena vista y no ví ningún mono.


De camino al avión el reba;o de ni;as iba detrás mía de tal modo que yo creía que me iban a pegar una paliza de un momento a otro. Creo que no se esperaban que me diese la vuelta y les dijera un sonriente "Hola", porque (para mi desgracia) comenzaron a soltar esas risitas de imbécil típicas de una ni;a mimada que tiene todo el jardín lleno de ponis. Estaban muy asombradas de que hubiera hablado... "Oh, nos ha hablado!!!" (No se que pu;etas se esperaban, que era mudo??).

Cuándo estaba en la escalerita del avión esperando a la cola, empezaron a pelearse detrás mía para tocarme (no hombre es broma), así que aproveché una broma que había hecho con mis amigos en Semana Santa y me volví otra vez y les dije desde lo alto: "Queréis espadas para mataros?". Es una mierda de broma pero es muy graciosa para mí. Se rieron mucho (que pringados, yo en realidad no tenía espadas jijiji) y la vida es amor.

Entré en el avión, tomé asiento y, como era de esperar, se sentaron en los sillones de mi alrededor. Bueno la verdad es que me enrollo mucho así que voy a resumir un poco. Primero, como es obvio empezaron con risitas y a decirse cosas estre ellas para avergonzarse mutuamente. Luego me empezaron a pasar móviles para comunicarme a través de mensajes y eso que estábamos a un metro y medio de distancia. Pasado un rato ya no podía con tanta gilipollez (No creais que mis mensajes eran de "Quieres que vayamos a tomar una Coca- Cola y después a ver Disney Channel en mi casa?",no. Eran de hacer galletas con tropezones de almendras con la receta de mi aguelita e irnos de fiesta con la Duquesa de Alba y esas cosas absurdas que yo hago) y les dije que por favor que quería hablar como una persona normal, utilizando las cuerdas vocales.

Estuvimos hablando todo el viaje (entre inacabables peticiones (más bien acosos) de Tuenti. Obviamente dije que me llamaba Paco Varela, jajajaja no tiene gracia, además es broma.

Bueno que eso. Hablé con una chiquilla que tenía la familia más unida del mundo: un hermano en Londres, su padre en Marruecos, su madre en Espa;a, su hermana en Alemania y ella en Dublín. Cuanto amor, madre mía.

Luego me harté de hablar de compras y mariconadas y busqué a los ni;os con pito para jugar a las cartas. Le quité el sitio a un pobre ni;o con gafas muy chiquitito y nos pusimos a jugar.

Después de eso me puse a contarles mi vida y mis aventuras por Irlanda. Los chavales no paraban de reír y su profesora histérica les decía que eran unos salvajes y esas cosas típicas de profesoras pringadas que todo el mundo odia y a las que nadie les hecha cuenta.

Me comí el bocadillo de jamón serrano de un chaval que hablaba italiano (le puse a traducir frases sin sentido como: Me encanta oler el reloj de un mono que baila con un tutú rosa en lo alto de una palmera y esas cosas de imbécil que sólo yo y algunos de mis tíos (ellos, obviamente, saben quienes son) solimos decir) antes de aterrizar. Cuando el avión tomó tierra, todas histéricas (querían quedar conmigo en Dublín!! De verdad yo con trece a;os jugaba al fútbol y veía Pokémon!) y tomamos cominos diferentes después de haberlo pasado muy bien. Los chavales eran de la clase de 1 ESO de un "insti" de Tomares.


Una vez recogida la maleta (que tardó en salir 2957589257 horas) estuve esperando 28975892 horas a la hermana de 21 a;os (que había estado la pobre una hora y media buscándome por todas las terminales del aeropuerto. Por lo menos, ahora se sabe los planos mejor que el arquitecto) y volvimos a casa.

La acogida estuvo muy bien, no me asesinaron ni nada de eso. Estuvo bien en serio.

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Una vez aquí me dijeron que había parido una de las yeguas que estaban pre;adas (tres. Ahora dos. Porque antes eran tres, pero ahora una ya no, entonces le restamos uno. Hacemos la operación y quedan tres. Solución: 2) y fuimos a ver al potrito. Nunca antes había tocado uno... en realidad no había visto uno tan enano nunca, así que estaba como era de esperar en mí: eustaquio... quiero decir, eufórico.

*(Aquí esta el potrito de princesas y amor, conmigo, obviamente. Yo soy el de la derecha)

Y luego pues nada. Fuí a cenar al McDonalds y comí hamburguesas, como es normal en un McDonalds.

En en lavabo de mi habitacíon me he encontrado dos gusanos (bancos con la cabeza marrón) y cómo antes había encontrado ya uno, fuí a decírleso al hermano mayor, que me dijo que al día siguiente se lo preguntaríamos al padre que qué eran. Se caen de la cosa esa que sirve para ventilar el aire para poder sobrevivir cada vez que haces un gran mojón pestilente.

 Yo, en un primer momento creía que eran termitas, y la verdad no me ha hecho mucha gracia dormir esta noche con un supuesto nido de termitas en toda mi cabeza... vamos! para que la gorda de la termita reina les ordene a las termitas pringadas que coman más madera y se rompa el techo y se caigan en mi cabeza. Me gustán los animales, pero es bueno para mí que tengan un tama;o estándar. Además en mi familia ya ha habido una aventurilla con esos dulces bichitos y no le resuló muy divertido a mi tío encontrarse por la noche con toda la cama llena de termitas que se sentían solas y habían decidido hacer un amigo grandote.

Esta ma;ana me he encontrado uno vivo. Así que lo he cogido con mis manitas (es que soy todo un hombre) y se lo he ense;ado al padre. Este me ha dicho que son larvas de polilla. En el agujero de ventilación hay nidos de pájaros y por lo que se supone (no se ven, están dentro del tubo que a su vez esta dentro de la estructura de la casa) esos nidos estrujados estarán llenos de gusanos. A mi me parece genial, porque prefiero que sean gusanos a que sean termitas. Y creo también que es el mismo gusano que me comí en el famoso vídeo de las casta;as, así que por curiosidad, voy a cojer los siguentes que se caigan y los voy a criar, para ver que polilla es.

Esto es todo por ahora, ya tengo planes que hacer con los amigos. Sinceramente, esto está mucho mejor que cuando me fuí. Un abrazo a todos y amaros unos a otros!! :-)